Descripción
En Cuando el mundo se llamaba Cerralbo, Ramón García Mateos recrea literariamente ese pueblo salmantino, que agiganta en el recuerdo —donde el tiempo se ensancha y se detiene– hasta elevarlo al territorio mítico de Macondo o Tomelloso o Castroforte do Baralla o Paniceiros o las Tierras Altas de Eliambroz o el condado de Yoknapatawpha.
Cerralbo existe porque lo imagina un niño desde la memoria auroral de Ramón García Mateos, un poeta que escribe prosa.
«No me cabe duda de que será una de esas novedades que no se llevarán los vientos otoñales. Por su historia, por lo que conmueve su lectura y por la manera de escribir del autor, esta novela es un plato de muy alta gastronomía literaria». (José Ignacio García).
«Una novela magnética, inolvidable, la más emocionante que he leído en los últimos años». (Ignacio Sanz).
«Una obra tan emotiva y tan bien escrita, que su edición resultaba imprescindible para preservar la memoria de aquellos años, de aquellos pueblos, de aquel vocabulario…». (Emilio Pascual).