Descripción
El apartado gráfico tiene gran importancia. Casi 250 fotografías acercan al lector no solo el palacio y su entorno, sino el paisaje y las gentes que lo intentaron mantener, a duras penas y sin las condiciones adecuadas, hasta la compra por parte del Ayuntamiento de Santander en 1977.
Tras leer el libro uno tiene la sensación de haber conocido el palacio y sus alrededores en cuerpo y alma, porque el autor ha tenido el mérito de convertir las piedras en carne.